miércoles, 12 de noviembre de 2008

LA GRAN ESTAFA



Desde la crisis de las inmobiliarias y después de la crisis de los neocons, algunos economistas como F. Chesnais, o Alan Woods nos decían que la economía norteamericana marchaba a pasos forzados hacia una recesión. Desde el reformismo y desde la derecha replicaban que el capitalismo se podía reformar a si mismo.
La Socialdemocracia, que ha bebido ya de esa ideología como fue el neoliberalismo, continuaba dando giros hacia "bendiciones" del sistema". Caían en una nueva mitología: ¡no existía alternativa! Por tanto sólo quedaba "humanizar" el capitalismo. Ponerles unos grados de ética. Pero olvidan a Marx que descubrió que para el capitalismo "lo verdaderamente justo" es la competencia y el individualismo posesivo.
Durante más de treinta años, desde la crisis del 73, se nos ha dicho los mismo siempre. Por un lado el eurocomunismo De Belinguer (PCI) o de S. Carrillo (PCE) defendía un concepto de derechas dentro del movimiento obrero. Se nos decía que era preciso la la austeridad, es decir, apretarse el cinturón para que en épocas de alza volver a exigir. El problema de esta teoría no era otro que con ello se se desermaba estratégicamente al movimiento obrero. Con dicha política dieron paso a Reagan y a toda la ideología neoliberal.
¡Bendita ideología! que ya no ve necesario a los sindicatos y que además individualiza el contrato laboral: "el trabajador es un individuo que, lo mismo que el capitalista arriesga, él, también debe de arriesgar". En la práctica el trabajador quedó desarmado, por lo que se le impuso una nueva disciplina, una nueva flexibilidad.... UNA NUEVA PRECARIZACIÓN.
Vino un nuevo ciclo de prosperidad, un nuevo ciclo de acumulación capitalista y el movimiento obrero continuó perdiendo nivel de vida. Aparecieron lo que se ha venido a llamar mileuristas. La distancia entre ricos y pobres se fue agrandando y además la acumulación se realiza a partir del capital financiero en detrimento del industrial. Pero esto es una estafa.
Pero ¿porqué engañarnos? cuando en sus origenes el capitalismo es en si mismo una GRAN ESTAFA. El ciclo inicial del capitalismo comienza con el capital ficticio. Una pequeña explicación: cuando un banco presta (en esta etapa) dinero ficticio, este se ha de "valorizar", y la valorización aparece con los intereses Como bien dice Marx: "Para refluir como capital, la suma de valor anticipada no sólo tiene que conservarse en el movimiento, sino que tiene que tiene que haberse valorizado, haber incrementado su magnitud de valor, esto es, regresar como una plusvalía, como D + /\D, y este /\D es aquí el interés".
Hoy el ciclo de robo y acumulación se ha roto. Y tenemos que volver a salvar a aquellos que robaron. El capitalismo se saca un conejo de la chistera: socializar las pérdidas con dinero del contribuyete. ¡Pero sabemos lo que significa esto!. El Manifiesto de la Corriente Marxista Internacional: "La administración Bush ha inyectado 700.000 millones de dólares en las arcas de los banqueros en un intento frenético de infundir vida a un sistema financiero moribundo. Es el equivalente de aproximádamente 2.400 dólares por cada hombre, mujer y niño de EEUU". ¿Cuántas escuelas, cuántos hospitales? ¿No se podría financiar la Seguridad Social en un país donde la medicina es para los ricos? Los banqueros nunca pierden. Pero sin embargo hay salidas y una de ellas pasa por el control democrático de los bancos basado en la apertura de cuentas, el control de los mismos por parte de los trabajadores y del gobierno.O también por una reducción del interés.....
Javier Méndez-Vigo

No hay comentarios: